Lechera
Acrílico sobre aluminio
Cuando empecé a estudiar de niño en el taller de un pintor siempre me fijaba en la lechera pintada que había en la entrada, me llamaba mucho la atención, era un cuadro sobre un objeto que tenía además una función práctica distinta de la original (hacía de paragüero). Desde entonces siempre quise pintar una, me costó años conseguirla, y estuvo aún más años guardada en el garaje de mis padres, pero por fin encontré el momento, una noche que no tenía que acostarme pronto, y el motivo, un hórreo asturiano, un paisaje costumbrista para decorar la entrada de una casa.